De acuerdo con una encuesta a 56 corporaciones y organizaciones gubernamentales dirigido por el Instituto Ponemon, el promedio del monto que se paga por costos asociados a un ciberataque fue de 8.9 millones de dólares durante el año pasado. Eso representa un 6 por ciento más que el año anterior.
Por primera vez, Ponemon expandió su encuesta a otros países, incluyendo el Reino Unido, Alemania, Australia y Japón. Los costos adscritos a ciberataques en esas regiones fue significativamente más bajo que en EEUU: un promedio de US$5.9 millones en Alemania y US$5.1 millones en Japón, por ejemplo.
El fundador de la firma que realizó el estudio, Larry Ponemon, reconoce que con apenas 56 empresas incluidas en la encuesta, la muestra es insuficiente para alcanzar una conclusión definitiva para explicar por qué los costos del cibercrímen son más elevados en EEUU que en el resto del mundo.
En el Reino Unido y en Australia, donde el costo anual del cibercrímen es de US$3.2 y US$ 3.3 millones respectivamente, los ataques de denegación de servicio (DoS) eran más frecuentes. Las compañías alemanas fueron las menos propensas a experimentar ataques con códigos maliciosos y de denegación de servicio, mientras que las japonesas estuvieron por debajo en el número de ataques maliciosos internos y aquellos basados en Web.
Las companies estadounidenses citaron que los robos de información representan el 44 por ciento de los costos externos.
El cibercrímen tiene un costo dentro de esas 56 empresas que participaron que va desde los US$1.4 hasta los US$46 millones. La mayoría de los costos de cibercrímen están relacionados con mitigaciones de ataques causados por denegación de servicio, ataques maliciosos internos, y también ataques basados en Web.
-Ellen Messmer, NetworkWorld