Las unidades para desechar bombas en áreas en conflictos tienen un trabajo extremadamente arriesgado al quitar o deshabilitar aparatos que amenazan la vida de cualquiera que esté al alcance. Pero algún día, las tropas puede que no tengan que arriesgar sus vidas para limpiar de explosivos las áreas del conflicto, gracias a una mano robótica.
La Sandia Hand de Sandia National Laboratories es una pieza impresionante de un conjunto que una tropa debiera tener. Esta mano puede alcanzar y destruir, o desmantelar una bomba para que un humano no tenga que hacerlo –simplemente tiene que controlar el robot con un guante especial. No solamente fue la mano robótica más eficiente en costos al momento de construirla, sino que se mueve igual que una mano humana, de tal forma que puede mover objetos difíciles de manipular y gracias a una capa parecida a la gel que cubre la mano, el robot agarra como un humano también.
El robot también puede repararse si resultara que se daña en la operación. Así, si se cae un dedo, por ejemplo, no habría problema: El Sandia Hand usa sus dedos restantes para localizar la parte, luego ajustarla de nuevo sin asistencia de humanos. Esta habilidad se debe a los 12 grados de libertad de la mano.
La construcción de este robot cuesta diez mil dólares, lo cual no resulta tan costoso dada la tecnología usada para armarlo y el hecho de que salva vidas.
Los desarrolladores reconocen que la mano no es sólo una herramienta importante para las tropas, sino también una buena forma de mantener las evidencias. Los métodos actuales para deshacerse de una bomba incluyen hacerla explotar, pero el robot puede desarmarla de forma tal que los investigadores pueden recoger evidencias que los lleve hasta el perpetrador de la bomba.
–Elizabeth Fish, PC World (US)