Dell podría realizar un cambio de estrategia como el que anunció en su día HP. La compañía estaría dispuesta a abandonar el mercado de las PC para centrarse en el sector empresarial.
Hace unos meses ya lo hizo Hewlett-Packard y estos días le ha tocado el turno a Dell que, en boca de su fundador y CEO, cada vez presta menos atención al negocio tradicional de la compañía, que está sufriendo las consecuencias de la irrupción de tablets y smartphones en un espacio que hace poco tiempo tenían acotado. Las PC y portátiles pierden fuelle en el mercado, y los fabricantes más clásicos parecen sufrir una lenta agonía. Hace poco más de un año, Hewlett-Packard, el todavía número uno mundial de PC, anunció que su dirección consideraba la posible venta de su negocio de PC, algo que finalmente descartó, son sin levantar un gran revuelo en la industria. Ahora llega el turno de Dell. Su fundador y CEO, Michael Dell, acaba de asegurar en una conferencia organizada por Fortune que la nueva Dell ya no está centrada realmente en el negocio de la PC. Esta es una sorprendente declaración del hombre que creó de la nada el cuarto mayor fabricante de PC del mundo. Es cierto, Dell puede que esté perdiendo terreno en los rangos, pero sigue entre los cinco primeros a nivel mundial, lugar que no ha abandonado durante 28 años. Y el pasado año ocupaba el segundo puesto, por detrás de HP, antes de que le superaran Lenovo y Acer. “En los últimos cinco años, hemos concentrado nuestro esfuerzo en el mundo de las soluciones completas”, aseguró Dell a una pregunta sobre su papel en el mundo de las PC. “Y las empresas donde está Dell también están centradas en la movilidad y la virtualización del cliente”, explicó. Pero, tras mencionar rápidamente su negocio de consumo, se centró en soluciones, centros de datos corporativos, servidores, almacenamiento, software, servicios y conectividad. Algunos de los datos que aportó explicaban este aparente desdén. La mitad del margen bruto de la compañía no procede de su negocio de PC. Dan Olds, analista del grupo Gabriel Consulting, cree que la compañía atraviesa “un proceso de reinvención. Todavía venderán PC, seguro, pero también un montón de cosas más”, asegura. Olds añade que es un movimiento inteligente diferenciar el negocio, cuando parte de él depende del turbulento negocio de la PC. “La industria de PC está marcada por una brutal competencia en precios, un rígido modelo de distribución, y una constante necesidad de estar al tanto de las últimas tendencias”, argumenta. “Además, el segmento de la PC es más duro de negociar que el de otros equipos, como tablets y smartphones, que está entrando constantemente en el territorio de las PC”. Otros analistas de mercado no dan por muerto a este mercado, pero coinciden en que deben lograr mejores márgenes, centrarse en mercados que tengan más posibilidades de crecimiento y que compensen su oferta de mercado con productos y servicios de alto margen. Algunos consideran que Dell está en la encrucijada que afrontó IBM en 2004, cuando abandonó su negocio de PC, porque ya no puede competir con nuevos jugadores, como Lenovo o Samsung, ni en precio ni en diseño. James Niccolai