En un mundo donde las condiciones económicas están fluctuando constantemente y son cada vez más complejas, contar con una infraestructura ágil y dinámica es un factor clave para el desarrollo de las empresas.
Adaptarse a los cambios para sobrevivir, y aún más para sacar provecho de ellos, es la meta de cualquier empresa moderna, y sólo puede alcanzarla si su infraestructura de TI los soporta. Pero los departamentos de TI deben estar dispuestos a cambiar primero si quieren servir de soporte al resto de la empresa. Las largas horas dedicadas a l mantenimiento de la infraestructura existente y los ajustes de las nuevas plataformas a ser desplegadas suelen ocupar la mayoría del tiempo del departamento de TI, por lo que queda poco para ocuparse de pensar en el negocio. Pero ya esto no tiene por que ser así con la infraestructura convergente de HP, una tecnología de autogestión de plataforma que permite invertir las proporciones del tiempo dedicados al mantenimiento y a pensar en el negocio, pasando del típico 70%-30% a un muy atractivo 30% dedicado al mantenimiento y 70% dedicado al negocio Esto además trae como consecuencia una agilidad empresarial mejorada, lista para reaccionar –e incluso anticipar—los cambios del mercado, alineando de mejor manera el negocio y la tecnología. Pero para que funcione la Convergencia de infraestructura, hay que meterse en el negocio. Se deben eliminar las “islas” de TI que aíslan datos y recursos de otras “islas” dentro de la organización. La premisa es maximizar el uso y disponibilidad de recursos para la organización como un todo, no para un departamento en particular. Los servicios de consultoría y soporte de HP juegan un papel fundamental en este proceso. En un próximo artículo, aprenderemos como se construye esta plataforma, y como puede usarse para optimizar los recursos que ya tiene, incluyendo su propia implementación de Nube.