La decisión del gobierno egipcio de cerrar el acceso a Twitter parece ser una confirmación de cuán potentes herramientas de protesta pueden ser los medios de comunicación social.
Por Vijayan Jaikumar
Computerworld (EE.UU.)
En un breve mensaje a principios de esta semana, Twitter anunció que Egipto había bloqueado el acceso a su sitio desde el interior del país poco después del inicio de las protestas a gran escala contra el presidente Hosni Mubarak.
El servicio sueco de vídeos Bambuser, dijo que su servicio también había sido bloqueado dentro de Egipto en lo que afirmó que fue un intento del gobierno para controlar la agenda de noticias, frente a las manifestaciones masivas.
Una historia “The Local”, un periódico en idioma Inglés en Suecia, cita al gerente general de Bambuser afirmando que cerca de 10.000 vídeos del Egipto se publicaron en su sitio durante las elecciones generales del año pasado.
El miércoles, Herdict, un proyecto de seguimiento de accesibilidad a la web a cargo de la Universidad de Harvard y el Centro Berkman para la Internet y la sociedad, anunció que hubo varios informes de que Facebook está inaccesible desde el interior de Egipto.
El bloqueo de estos sitios parece estar impulsado por las preocupaciones acerca de que sean utilizadas por los ciudadanos para reunir más oposición contra el gobierno y para eludir sus intentos por controlar las noticias.
En 2009, por ejemplo, Twitter surgió como una herramienta de comunicación importante durante una dura represión del gobierno en Irán, tras las disputadas elecciones en el país. Cuando las autoridades de Irán cerraron varios medios de comunicación, incluidas las líneas de teléfono, videos de Facebook, YouTube y los sistemas de mensajería de texto, miles de iraníes comenzaron a usar Twitter para comunicarse entre sí y el resto del mundo.
Los disturbios en Irán mostraron por primera vez cómo Twitter también podría utilizarse para movilizar rápidamente un ejercito de ciber-voluntarios para lanzar ataques de denegación de servicio contra el gobierno y objetivos comerciales de importancia.