Los hackers maliciosos y grupos de cibercrimen organizado ya utilizan ChatGPT para crear herramientas de ataque a gran velocidad
La irrupción en la escena tecnológica del chat GPT ha sido vista como una oportunidad para unos y un desafío para otros. Desafortunadamente, los ciberdelincuentes forman parte del primer grupo. Según una publicación compartida desde TheStandard CIO, los hackers maliciosos y grupos de cibercrimen organizado ya utilizan el chatbot para crear herramientas de ataque a gran velocidad.
De acuerdo con un informe compartido por Check Point Research – la división de Inteligencia de Amenazas Check Point Software Technologies – los ciberdelincuentes están creando malware del tipo Infostealer, herramientas de cifrado y facilitando la actividad fraudulenta utilizando esta herramienta de inteligencia artificial. Según alerta Alejandro Botter, gerente de ingeniería de Check Point para el sur de Latinoamérica:
Los ciberdelincuentes están considerando a ChatGPT muy atractivo. En las últimas semanas estamos viendo pruebas de cómo los ciberdelincuentes empiezan a utilizarlo escribiendo código malicioso. ChatGPT tiene el potencial de acelerar el proceso, puesto que les ofrece un buen punto de partida.
El especialista destacó que ChatGPT puede utilizarse de forma positiva como ayuda a los desarrolladores a escribir código, pero también funciona bien con fines maliciosos.
Aunque las herramientas que analizamos en este informe son bastante básicas, es sólo cuestión de tiempo que los ciberdelincuentes más sofisticados mejoren la forma en que utilizan las herramientas basadas en IA. CPR seguirá investigando la ciberdelincuencia relacionada con ChatGPT en las próximas semanas.
Entre el bien y el mal
Botter recordó que, desarrollado por la empresa OpenAI con sede en San Francisco, ChatGPT es un nuevo chatbot de inteligencia artificial que brinda respuestas de calidad humana a las preguntas que realiza el usuario de una manera sorprendentemente creativa, detallada e inquietantemente conversacional.
En este sentido, para el especialista dicha tecnología tiene un gran potencial para ayudar al sector de la ciberseguridad a acelerar el desarrollo de nuevas herramientas de protección y validar algunos aspectos de la codificación segura. Pero tal como se ha comprobado, la introducción de esta nueva tecnología también conlleva un riesgo potencial que no puede desestimarse.
Recordó que el mundo experimentó un aumento del 38% en los ciberataques en 2022 y aún cuando ChatGPT no había debutado, el 2023 se consideraba un año potencialmente más riesgoso.
Este reporte es mucho más extenso e interesante, de modo que si lo quieres ver completo, te invitamos a continuar su lectura en nuestra web hermana, The Standard CIO, haciendo clic en el enlace de abajo: