IE vs. Firefox vs. Chrome vs. Safari vs. Opera: Nuestras pruebas de laboratorio dan a conocer el navegador más rápido, el más seguro y la herramienta más poderosa para la Web.
De todo el software en su PC, posiblemente el navegador de la Web sea la herramienta más importante que usa cada día, aunque quizá no le presta mucha atención. Sin embargo, la diferencia entre un navegador meramente bueno y uno magnífico puede ser enorme. Los mejores navegadores son lo que se destacan en algo: cuando usted está en el navegador correcto, se siente como si estuviera solo en su sitio favorito. El navegador carga páginas rápidamente, sin congelarse, y puede manejar diestramente cualquier página de la Web que usted visite sin pedirle que haga nada.
Pero el navegador es mucho más que eso. Para satisfacer a los usuarios que requieren más potencia, debe reconocer una serie de complementos y extensiones. Debe ser personalizable. Y para protegerlo en línea, debería hacer una buena labor detectando y bloqueando las amenazas potenciales a la seguridad—como los ataques de phishing o de secuencias de comandos de sitio cruzado—y ser resistente al software malicioso.
Nosotros pusimos a prueba los cinco navegadores principales: Internet Explorer, Firefox, Chrome, Safari y Opera, a través de prácticas de laboratorio y exámenes subjetivos para ver exactamente cómo se comparan desde el punto de vista de la interfaz, la seguridad, los extras y la velocidad. Esto es lo que encontramos.
Interfaz del Usuario
Todas las interfaces de navegador siguen la misma fórmula básica. Pero dentro de esas limitaciones, los navegadores tienen algunas diferencias notables. Primero que nada, usted puede aprender bastante sobre el enfoque de una compañía en el desarrollo de productos con sólo mirar las interfaces del navegador. Por ejemplo, el Apple Safari tiene una buena cantidad de retoques y terminación. El Google Chrome es espartano y sin adornos, y la interfaz de Mozilla Firefox es útil pero luce anticuada en comparación con los rivales más modernos.
Está de moda la delgadez. Casi todos los navegadores ahora tienen una apariencia modernizada, con menos barras de herramientas y más estrechas – y en muchos casos en Windows, sin ninguna barra de menú. Este tipo de diseño por lo general trabaja bien, ya que comúnmente incluye menús desplegables en la barra de herramientas que le dan acceso fácil a las características del navegador.
Firefox, Chrome y Opera le permiten aplicar diferentes pieles a las barras de herramientas. Por lo general yo hallo que es muy simple ubicar y cambiar pieles en estos navegadores. Google, por ejemplo, tiene una colección en línea que le permite examinar y aplicar temas para Chrome. Mozilla tiene un sitio similar para Firefox. Una parte interesante de las pieles de Firefox, llamadas Personas, es que puede “experimentar” con cualquiera de las pieles de sólo pasar el puntero del ratón sobre las miniaturas en el sitio de Personas. En Opera, entretanto, usted busca los temas desde un panel de control en la propia aplicación; este método es aceptable pero el panel no es tan fácil de examinar como las galerías de Chrome y de Firefox.
Nosotros basamos nuestra evaluación en la facilidad de uso, la terminación, la flexibilidad y el diseño de la interfaz de cada navegador. También analizamos si la interfaz entorpece demasiado al usuario, o si permitió que los sitios de la Web fueran el centro de la atención.
Internet Explorer 8. Internet Explorer, el principal navegador en el mercado, tiene una interfaz decente en la versión 8, pero parece abarrotada frente a los rivales más nuevos. Sin embargo, dos aspectos de su diseño de navegación en fichas resultan útiles. Primero, IE 8 agrupa las fichas relacionadas usando colores. Si usted abre un vínculo de PCWorld.com en una nueva ficha, por ejemplo, se abrirá junto a la ficha original y las fichas tendrán el mismo color. Usted puede mover fichas de un grupo a otro; pero si tiene abiertas tres páginas no relacionadas, por ejemplo, no podrá crear un grupo con ellas.
Segundo, IE 8 ofrece una vista de miniaturas de fichas: Pulse el botón en miniatura (el que tiene cuatro cuadrados) en la barra de fichas y se abrirá una pantalla con miniaturas del contenido de sus fichas abiertas. Es una buena manera de verlo todo al mismo tiempo; pero es discutible si es mejor que las miniaturas de Opera.
Firefox 3.6. Manteniendo el mismo aspecto básico de las versiones anteriores de Firefox, la versión 3.6 parece anticuada. Tiene más “cromo de ventanas” (la barra de herramientas, los menús, la barra de título y demás de una ventana) que las últimas versiones de Chrome o de Safari, por eso luce como algo del año 2006, no del 2010. Además, su naturaleza altamente compatible con varias plataformas, a veces puede lucir un poco fuera de lugar, incluso en Windows.
Pero no hay nada realmente malo en la interfaz de Firefox y tiene bastante exquisiteces. Por ejemplo, su barra de Encontrar facilita la búsqueda de una palabra o frase específica en cualquier página determinada. Y aunque Firefox no es el único navegador que tiene una característica de terminación automática de URL, lo hace mejor que la mayoría de los otros navegadores.
Una nota: poco antes del cierre, Mozilla publicó un versión beta de Firefox 4. Entre las nuevas características está una interfaz renovada que toma ideas de rivales como Chrome y Opera. Visite PCWorld.com para encontrar nuestra cobertura de Firefox 4 ahora que se acerca su versión final.
Chrome 5. Con Chrome, Google aplicó su característico estilo sobrio a su navegador. La ventana principal sólo tiene los fundamentos (una barra de fichas, un campo de direcciones, botones de regresar/avanzar/recargar y un par de botones para menús desplegables), eso permite que la página que usted examina sea la estrella del espectáculo. Usted no encontrará una barra de condición; los mensajes que aparecen mientras la página se carga se muestran cuando sea necesario en el fondo de la ventana. El resultado total es un navegador vistoso, veloz y receptivo.
La navegación basada en fichas se presenta en una forma atenta. Las fichas se encuentran arriba de todo lo demás en la página, lo cual produce un flujo lógico de información en la ventana. Cuando usted abre páginas, las fichas se encogen para ocupar el espacio disponible; y cuando cierra fichas, vuelven a crecer.
Safari 5. Safari provee todas las opciones estándares pero incluye un poco del estilo de Apple. Por ejemplo, la barra de direcciones también sirve como la barra indicadora del progreso de carga de la página. La página principal predeterminada muestra miniaturas de los sitios visitados con más frecuencia contra un fondo negro. El administrador de marcadores de página está bien distribuido y le permite ver miniaturas de las páginas marcadas al pulsar sobre los marcadores.
Hay una nueva característica en Safari 5 que es una de mis favoritas en cualquier navegador: Safari Reader. Cuando usted lee un artículo en un sitio en Safari 5, puede pulsar el botón de Reader en la barra de direcciones y saldrá una capa que muestra sólo el texto del artículo. La característica ha ocasionado controversias en ciertos círculos—algunos operadores de sitios dicen que afecta la venta de anuncios—pero facilita mucho la lectura de un artículo. Por otra parte, Safari encaja varias convenciones de interfaz de Mac a los usuarios de Windows, así que quizás no sea del gusto de todos.
Opera 10.6. Todos los elementos del menú de Opera están bajo un solo botón de menú pequeño—y el botón desaparece si usted oculta la ficha de la barra, en cuyo caso tiene que oprimir la tecla <Alt> para recuperarlo. Tengo que reconocer que la gente de Opera ha tratado de hacer algo diferente, pero el resultado quizás sea demasiado minimalista.
En parte a causa de esa estética, la interfaz de Opera es limpia, pulida y atractiva. También es sumamente flexible, con un número saludable de barras de herramientas para escoger. Algunas de ellas, como la barra de favoritos (Opera la llama Barra personal), ocupan más espacio en pantalla de lo debido. Opera también le da la opción de mostrar miniaturas de páginas en la barra de fichas; es un excelente modo de distinguir una ficha de otra y es una de mis características favoritas.