Una nueva reestructuración de plantilla, que afectaría a unos 3.000 ó 4.000 empleados de la tecnológica, fundamentalmente del área comercial. El 75% de los despidos se realizarán fuera de Estados Unidos.
El rumor sobre la reestructuración de la plantilla de Microsoft, de la que muchos medios se hacían hace unos días, fue finalmente confirmada.
Un portavoz de la compañía dijo a la cadena estadounidense CNBC. “Microsoft está implementando cambios para servir mejor a nuestros clientes y socios” y, además, destacó que “hoy estamos avanzando para notificar a algunos empleados que sus trabajos se escuentran bajo consideración o que sus posiciones serán eliminadas. Como todas las compañías, evaluamos nuestro negocio de forma regular. Esto puede conllevar un aumento de la inversión en algunas áreas y, de vez en cuando, reorganización en otras”.
En esta nueva ola de despidos, que afectará a unas 3.000 o 4.000 personas (Microsoft, que no ha confirmado el dato exacto, tiene 121.000 empleados en todo el mundo), el cambio de modelo de negocio hacia cloud, clara apuesta del CEO de la compañía, Satya Nadella, tiene mucho que ver.
El modelo cloud, en el que Microsoft batalla con su plataforma Azure, es un espacio complejo en el que competidores nativos digitales como Amazon o Google despuntan cada vez más. La reestructuración del equipo global de ventas estaría, por tanto, encaminada para reforzar la venta de software en la nube del gigante de Redmond.
La reestructuración coincide con el cambio reciente del liderazgo del área de ventas y marketing. Judson Althoff y Jean-Philippe Courtois sustituyeron hace un año a Kevin Turner. Éstos han intentado dar un enfoque opuesto a la actividad anterior y están dispuestos a poner a Azure en el centro de su estrategia para competir con rivales como Amazon o Google en este segmento.
Esta no es la primera reestructuración que acomente la compañía en los últimos años. En 2015 despidió a 7.800 empleados y en 2016 a casi 3.000.