En los últimos dos años la base de usuarios de la red creció poco más de 25% y su valor en el mercado cayó a menos de la mitad. 5 de los más importantes Vicepresidentes están fuera de la empresa.
PC World en Español/William Peña
Lo que está pasando con Twitter es, sencillamente, una clara crisis de innovación y estrategia. La red, que se consolidó más como un medio de referencia noticiosa y que contribuyó con oxigenar a millones de ciudadanos que no tenían acceso a medios de comunicación para emitir sus opiniones, no ha logrado convencer, como la competencia, a millones de nuevos usuarios jóvenes para formar parte de la plataforma, sobre todo a aquellos que demuestran poco interés por estar informados y que buscan más conexión, diversión y entretenimiento con las plataformas de redes sociales.
La crisis, que los analistas consideran grave porque no le permite a la empresa crecer a ritmos más acelerados (sólo 63 millones de nuevos usuarios en los últimos dos años), ya sumó su primer golpe con la caída de la acción a unos $17, menos del valor inicial de cuando la empresa se hizo pública. Hoy la acción está casi 30% menos que su salida a Bolsa en $23 en el 2013.
El despido o renuncia la semana pasada de cinco de sus más importantes ejecutivos (Katie Stanton, VP de Medios, Kevin Weil, VP de Producto, Alex Roetter, VP de Ingeniería y el vicepresidente de Recursos Humanos, Brian Schipper), también confirmó que la empresa está en la búsqueda de más acción, más innovación y estrategia para enfrentar los retos que vienen, mucho más ahora que plataformas como SnapChat e Instagram están mejorando para consolidarse entre las generaciones más jóvenes.
Y no es para menos. El 2015 fue el año de menor crecimiento para la empresa, lo que llevó a un despido del 8% de la fuerza laboral y a un cambio en la conducción de la compañía. Pero la llegada del nuevo Presidente, Jack Dorsey, quien retornó a Twitter, tampoco ha sido beneficiosa.
Los proyectos lanzados, como Moments, una plataforma que permitía organizar hechos noticiosos en una serie de tweets claves, no tuvieron el éxito esperado y la empresa está buscando otras vías para transformarse y darle tranquilidad a los inversionistas.
La decisión de incrementar el número de caracteres por Tweet tampoco ha sido bien recibida y la empresa parece perdida, en medio de una crisis que podría impactar aún más su valor en el mercado.
El presidente, Jack Dorsay, dijo en octubre pasado, durante una conferencia telefónica sobre ingresos, que haría esfuerzos en “contratar e invertir en talento” y que era necesario un “audaz replanteamiento”. Pero hasta hoy, eso parece que no ha sido posible y, mientras se toman las decisiones, la plataforma sigue causando nervios a los inversionistas.