swan

Cometa SWAN se desintegra tras pasar por el Sol

El cometa verde SWAN, proveniente de la Nube de Oort y descubierto por astrónomos aficionados, probablemente se rompió tras acercarse al Sol y no será visible a simple vista, según expertos de la U.S. Naval Research Laboratory.

El cometa SWAN, una nueva joya celeste descubierta recientemente por astrónomos aficionados, parecía prometer un espectáculo visible a simple vista gracias a su brillante color verde. Sin embargo, todo indica que este objeto proveniente de la Nube de Oort, más allá de Plutón, no logró sobrevivir a su paso cercano al Sol. Según el astrofísico Karl Battams, del Laboratorio de Investigación Naval de Estados Unidos, lo que queda de SWAN es “un montón de escombros polvorientos”.

Durante las últimas semanas, el cometa había sido visible a través de telescopios y binoculares, mostrando una cola brillante y extendida. Pero ahora su brillo disminuye rápidamente, acabando con las expectativas de una observación directa sin instrumentos.

Un vestigio del origen del sistema solar

Los cometas son bolas de gas congelado y polvo que datan de hace miles de millones de años. Se cree que estos cuerpos celestes son vestigios del nacimiento del sistema solar. “Son reliquias de la formación original del sistema solar”, explicó Jason Ybarra, director del Planetario y Observatorio de la Universidad de Virginia Occidental.

Este cometa en particular, designado C/2025 F2, fue detectado por aficionados que analizaron imágenes capturadas por una cámara de una nave operada en conjunto por la NASA y la Agencia Espacial Europea, cuyo objetivo principal es observar el Sol.

A diferencia de otros cometas como Tsuchinshan-Atlas (2024), Neowise (2020), Hale-Bopp o Hyakutake (ambos en los 90), el cometa SWAN no se acercó lo suficiente a la Tierra como para ser observado con claridad, ni siquiera al anochecer, cuando su tenue color verde habría sido apenas perceptible a simple vista.

Un viaje único que terminó antes de tiempo

Todo parece indicar que esta fue la primera visita del cometa SWAN al interior del sistema solar. Esto lo hizo especialmente frágil ante el calor del Sol. “Fue un viaje debut muy riesgoso”, comentó Battams. Subrayando que ahora se desintegra rápidamente y desaparecerá en los confines del sistema solar, posiblemente para no regresar jamás.

Su destino final lo llevará tan lejos que será imposible rastrearlo. “Irá tan lejos que no sabemos si volveremos a verlo alguna vez”, concluyó el astrofísico.

Fuente: The Associated Press, con el respaldo del Howard Hughes Medical Institute y la Robert Wood Johnson Foundation.