Mujeres en Chile aprovechan el patrocinio en sugar dating para crear y fortalecer sus propios negocios.
Con más de 193,000 mujeres registradas en MySugarDaddy, aproximadamente el 30% de las mujeres en Chile están utilizando el patrocinio en sugar dating como una herramienta para iniciar o expandir sus emprendimientos. En la era de la economía colaborativa y el crecimiento del emprendimiento femenino, el sugar dating está tomando un giro inesperado: convertirse en una plataforma para impulsar ideas de negocio y empoderar económicamente a mujeres jóvenes.
Sugar dating como apoyo estratégico para mujeres emprendedoras
A través de plataformas como MySugarDaddy, las “sugar babies” no solo encuentran apoyo financiero, sino también mentoría y conocimiento práctico de sus “sugar daddies”, lo cual facilita el desarrollo de proyectos empresariales. Este tipo de relación, despojada de estereotipos, permite a las mujeres jóvenes establecer alianzas estratégicas que contribuyen al empoderamiento económico y profesional.
El contexto de emprendimiento femenino en Chile
En América Latina, el espíritu emprendedor femenino está en auge, y Chile se destaca como un líder regional en participación femenina en los negocios. Según un estudio de la Global Entrepreneurship Research Association, el 30% de las mujeres chilenas entre 18 y 64 años están en fases iniciales de emprendimiento, posicionando al país como referente en iniciativas de negocio lideradas por mujeres.
Un nuevo rol para los sugar daddies: mentores e inversores
“Cada vez más mujeres buscan en nuestras plataformas patrocinio no solo para mejorar su estilo de vida, sino para desarrollar un negocio,” comenta Laura Gerling, Marketing Specialist de MySugarDaddy. “Hoy, los sugar daddies no solo financian sino que actúan como mentores, aportando conexiones y experiencia que aceleran el éxito de los proyectos de sus sugar babies. Esto ha transformado el sugar dating en una oportunidad de empoderamiento social y económico.”
Patrocinio con propósito: testimonio de una emprendedora
Para muchas mujeres, un sugar daddy significa más que un respaldo financiero: representa acceso a conocimientos empresariales, asesoría práctica y contactos clave. Ana López, emprendedora en moda sostenible en Santiago y usuaria de MySugarDaddy, cuenta: “Con el apoyo de mi sugar daddy, lancé mi negocio. Su respaldo no fue solo económico; también me guió en marketing y networking. Es una oportunidad inmensa cuando ambos tienen objetivos claros.”