A pocos meses de su llegada y sin conocer su precio, el poder es una de las características más obvias para elegir una u otra.
¿Cuál consola es la más poderosa? es la única pregunta que podemos responder con seguridad sobre la Xbox Series X y la PlayStation 5. Y es el otro factor decisivo todavía no lo conocemos: el precio.
Pero prepárate a conocer las características técnicas de las consolas de siguiente generación, y decidas por ti mismo cuál de las dos será la reina de la colina en términos de poder.
El núcleo de esta próxima generación de proyectos es la CPU (“unidad central de procesamiento”) y la GPU (“unidad de procesamiento de gráficos”). Si la CPU es un cerebro que maneja los cálculos internos, entonces la GPU es el corazón; se utiliza para renderizar los gráficos y mejorar la funcionalidad del procesador acelerando y redistribuyendo el flujo de datos. ¿Se pregunta qué significa eso? Básicamente, la CPU y la GPU deben trabajar en armonía para que las consolas de última generación logren imágenes más realistas y similares al trazado de rayos.
No es de extrañar que tanto Sony como Microsoft hayan optado por asociarse una vez más con la empresa tecnológica AMD en este frente.
El SSD (“Solid State Drive”) de la consola es igualmente importante. Esto permite una carga mucho más rápida, y es un verdadero cambio de juego. Despídanse de las pantallas de carga tal y como las conocemos.
PlayStation 5
Empecemos con las especificaciones iniciales de PS5, las cuales no son un secreto. Su CPU será un chip Ryzen de tercera generación (un Zen 2 de ocho núcleos con la microarquitectura de 7nm propiedad de AMD). En cuanto a la GPU, es una variante muy personalizada del Radeon Navi de AMD, que puede simular el audio en 3D y soporta el trazado de rayos. Ofrece 10,28 teraFLOPs y 36 CUs (‘unidades de cálculo’) a 2,23GHz. Conjuntamente con 16 GB de RAM GDDR6.
En cuanto al almacenamiento, la PS5 incluye una SSD personalizada de 825 GB que funciona a 5,5 GB por segundo, con espacio para SSD NVMe adicionales o discos duros estándar si lo prefieres.
Xbox Series X
Microsoft fue igual de comunicativo con los detalles de las especificaciones de la serie Xbox. Al igual que Sony, han estado trabajando con AMD para co-diseñar una plataforma personalizada de sistema en chip (lo que significa que la CPU y la GPU están integradas). También tienen un sistema Zen 2 de ocho núcleos, pero el suyo funciona a 3,8 GHz. Mientras tanto, la GPU puede manejar 12 teraFLOPs con 52 CUs a 1.825GHz. Lo anterior permite a la Xbox Series X soportar el trazado de rayos en tiempo real acelerado por hardware, con lo que obtiene unas magníficas imágenes.
Finalmente, la consola tiene 16 GB de RAM GDDR6 con un robusto SSD de 1 TB que funciona a 2,4 GB por segundo. Si quieres más, puede ser compatible con la tarjeta de expansión de almacenamiento Xbox Series oficial, que ofrece 1 TB de espacio extra.
¿Cuál consola es la más poderosa?
A modo de comparación, la Xbox Series X contará con 12 teraflops de rendimiento, basados en la nueva arquitectura RDNA 2 de AMD. La GPU contará con 16 GB de memoria GDDR6 en un bus de memoria variable: 10 GB se ejecutarán a 560 GB / s, mientras que los 6 GB restantes se ejecutarán a 330 GB/s más lento.
La Serie X admitirá dos tipos de memoria externa, lo que le permite ampliar el almacenamiento SSD con una unidad patentada de Seagate o almacenar juegos en un HDD externo (de la misma manera que la Xbox One).
Al igual que la Xbox Series X, la PS5 también tendrá soporte de trazado de rayos para ayudar a los desarrolladores a crear juegos más atractivos.