El Top 10 de la supercomputación es liderado por China, quien desplazó a Estados Unidos hace tiempo y, para el 2017, mantiene la supremacía.
Sí, los nuevos PC para juegos que soportan dispositivos de realidad virtual son increíblemente rápidos pero… ¿pueden hacer simulaciones sobre el comportamiento del universo durante miles de años? ¿Alertar sobre las causas de las destructivas tormentas de verano en Europa? ¿Garantizar la seguridad de las armas nucleares?
No, estos son trabajos de los supercomputadores. Éstos, también conocidos como equipos de alto rendimiento (High Performance Computers o HPC, en inglés), son altamente utilizados en universidades, laboratorios de investigación y otros centros en todo el mundo. Dos veces al año el proyecto TOP500 realiza un ranking sobre los mejores equipos del mundo en supercomputación utilizando el benchmark Linpack.
La lista más reciente, lanzada en junio de 2017, está encabezada por dos supercomputadores chinos. Estos son los 10 primeros:
Número 1: Sunway TaihuLight
Sunway TaihuLight sigue siendo por segunda vez el computador más poderoso del mundo. Esta bestia vive en el Centro Nacional de Supercomputación de Wuxi, en China, donde sus más de 10 millones de CPU han creado la mayor simulación del universo. Ésta cubre millones de años en la historia del universo con el fin de ayudar a los científicos a realizar nuevos descubrimientos. Su velocidad es de 93 petaflops. Se dice, además, que en China se está trabajando en la creación del supercomputador más potente visto nunca, que tendría un rendimiento diez veces superior al de TaihuLight.
Número 2: Tianhe-2
Desarrollado por la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa de China, está ubicado en el Centro nacional de supercomputación en Guangzho, China. Con 33,86 petaflops, este equipo ha estado seis veces consecutivas en primer puesto de la lista Top500 pero en 2015 pasó a segunda posición. Un dato curioso: en abril de 2015 y debido al miedo a que se usara en actividades nucleares, el Gobierno de Estados Unidos rechazó la solicitud de Intel para exportar una licencia que habría incrementado cuantitativamente la capacidad de proceso de Tianhe-2.
Número 3: Piz Daint
Piz Daint es una montaña en los Alpes suizos que se traduce como “el pico más interior”. Es también el nombre del tercer superequilpo más poderoso del mundo instalado (dónde si no) en Suiza, en el Centro Nacional de Supercomputación del país. Es un sistema Cray XC50 que pasó de estar en el octavo puesto al tercero en 2016, gracias a una renovación que triplicó su rendimiento. Los científicos del clima de Berna lo usaron recientemente para estudiar las causas de las destructivas tormentas de verano sucedidas en Europa. Su velocidad alcanza los 19,5 petaflops.
Número 4: Titan
Se trata de una supermáquina Cray XK7, que llegó a ser número uno en noviembre de 2012 y está instalada en el Laboratorio Nacional Oak Ridge del Departamento de Energía de Estados Unidos. Si alguna vez se ha preguntado cómo afectan los vientos galácticos a la formación de estrellas en las galaxias puede estar tranquilo. Un equipo de investigación de la Universidad de California trabaja en ello usando la capacidad de proceso de Titan para generar la que podría ser la mayor simulación realizada nunca de una galaxia. Su velocidad alcanza los 17,5 petaflops.
Número 5: Sequoia
Es un super equipo de IBM BlueGene/Q supercomputer. El pasado año se encontraba en cuarto puesto. Según el Departamento de Defensa de Estados Unidos, “Sequoia, uno de los supercompuatdores convencionales más rápidos, tiene menos capacidad de cómputo que el cerebro y consume 7,9 megavatios. No obstante, Sequoia, instalado en el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore, en el Departamento de Energía de Estados Unidos, realiza un importante trabajo: cuantificar incertidumbres en las simulaciones numéricas del rendimiento de las armas nucleares y ejecutar cálculos científicos avanzados en dicho armamento. Su velocidad de proceso alcanza los 17,1 petaflops.
Número 6: Cori
Este Goliat Cray XC40 le debe su nombre a Gerty Cori, la primera mujer que ganó un premio Nobel en Medicina (y también la primera mujer en ganar este premio en Estados Unidos). Este equipo es una pieza clave en el Nuevo Centro de Big Data auspiciado por el Centro de Computación Científica de Energía Nacional de Estados Unidos, Intel y cinco centros de computación paralela de Intel. Su velocidad de proceso es de 14 petaflops.
Número 7: Oakforest-PACS
Oakforest-PACS es un sistema Primergy de Fujitsu operado por el centro nipón avanzado para Computación de Alto Rendimiento. Está instalado en el Centro de Tecnología de la Información de la Universidad de Tokio. Oakforest-PACS es el supercomputador más rápido de Japón, justo por delante de K. Fue construido para la investigación y la ciencia y su velocidad de proceso es de 13,5 petaflops.
Número 8: Computadora K
Además de ser un gran supercomputador, este equipo de Fujitsu permite una investigación avanzada del clima, trabajar en la prevención de desastres, etc. Está instalado en Instituto Avanzado Riken de Ciencia Computacional en Kobe, en Japón. Fue el número uno del mundo en 2011 y en estos años ha ido bajando posiciones. Su velocidad es de 10,5 petaflops.
Número 9: Mira
Mira es un Sistema IBM BlueGene/Q system ubicado en el Laboratorio Nacional Argonne del Departamento de Energía de Estados Unidos. Desde su entrada en la lista TOP500 en junio de 2012, ha ido poco a poco bajando posiciones, del cuarto al quinto puesto, estando ahora en el noveno. Su capacidad de proceso de 8,59 petaflops permite a los científicos investigar en sismología, climatología y química computacional, entre otros aspectos. Este verano Mira tiene un compañero: Theta, también en Argonne, un Cray XC40 que se encuentra en el puesto 16 de la lista TOP500.
Número 10: Trinity
Se trata de un Cray XC40 utilizado por el Laboratorio Nacional Los Álamos, en Estados Unidos. Su trabajo es increíblemente importante: garantizar que el arsenal nuclear del país es seguro. Trinity realiza un análisis de datos clasificado que envía a la Administración Nacional de Seguridad Nuclear. Su velocidad alcanza los 8,1 petaflops.