Se trata de una solución accesible a cualquier persona, pues vivir en una Smart Home ya no está relacionado con el lujo, sino con un modelo de vida contemporánea
En la temporada de verano es habitual que aumenten los robos en los hogares, aprovechando que las familias se van de vacaciones.
Justo en ese tiempo, es que los ladrones se apresuran a cometer sus fechorías y, en muchos casos, aplican cada vez más y de forma minuciosa diferentes métodos para asaltar las viviendas.
Comprobar la posición de las ventanas, las luces, los vecinos, etc, es una de las más importantes para ser exitosos. Por eso, en la compañía tecnológica de la indrustria Smart Home, Loxone, explican que usar un simulador de presencia es un aspecto clave para evitar los robos.
Este tipo de sistemas de control tecnológicos graban el comportamiento de luces y persianas y, en el momento en que la vivienda queda desocupada, los reproduce durante un horario en concreto. Por ejemplo, durante la mañana o al atardecer, sube y baja persianas y enciende algunas luces para simular que los inquilinos siguen en casa.
Además, se trata de una solución accesible a cualquier persona, pues vivir en una Smart Home ya no está relacionado con el lujo, sino con un modelo de vida contemporánea.