La startup Argo AI será la encargada de administrar los fondos para hacer de Ford un poder en los carros sin conductor guiados por Inteligencia Artificial.
PC World en Español
El gigante estadounidense Ford, anunció los planes para invertir 1.000 millones de dólares a lo largo de los próximos cinco años en una startup de inteligencia artificial fundada por antiguos empleados de Google y de Uber, llamada Argo AI, que será la encargada de promover el desarrollo de la inteligencia artificial en los vehículos de conducción autónoma.
La gran inversión hará que Ford se convierta en el accionista mayoritario de Argo AI, aunque esta compañía ha sido estructurada para operar con una “independencia sustancial”, según dijo Ford.
La intención es combinar el programa de desarrollo de autos de conducción autónoma de Ford con la robótica de Argo AI y la velocidad de arranque de su software de inteligencia artificial.
Los fundadores de Argo, Bryan Salesky y Peter Rander, son exalumnos del Centro Nacional de Ingeniería Robótica de la Universidad de Carnegie Mellon y antiguos directivos de los equipos automovilísticos de Google y Uber, respectivamente.
El equipo de Argo AI estará formado por especialistas en robótica e ingenieros de dentro y de fuera de Ford y trabajará para desarrollar una nueva plataforma de software para el vehículo completamente autónomo de Ford, que se espera vea la luz en 2021. Asimismo, la compañía dijo que también podrá ofrecer las licencias de este software a otros fabricantes de carros.
“La compañías de carros no quieren licenciar nada de otras compañías a menos que tengan que hacerlo. En pocos años habrá una gran consolidación porque hay más fabricantes que compradores”, afirma Michael Ramsey, director de Investigación de Gartner.
La adquisición de Argo AI por parte de Ford debería considerarse más como un movimiento de estructura organizativa que como una inversión en la empresa.
“Ford está tratando de crear un sistema con el que poder contratar a los mejores talentos y recompensarlos, fuera de la burocracia que existe dentro de la compañía. No debe ser visto como un regalo de 1.000 millones de dólares a dos chicos”, sostiene Ramsey.
El actual equipo que desarrolla el sistema de conductor virtual de Ford, el software de aprendizaje automático que actúa como el cerebro del coche autónomo, se mezclará con el talento y la experiencia del equipo de Argo AI. La asociación, tal como ha explicado Ford, trabajará para lanzar el sistema de conductor virtual de los carros de nivel 4 SAE de conducción autónoma de la compañía en un período de cinco años.
A finales de este año, Argo tendrá oficinas en el sureste de Michigan y California, de acuerdo con Ford, junto con su sede en Pittsburgh, sumando un total de más de 200 trabajadores entre las tres sedes.