Investigadores finlandeses desarrollan una técnica para reducir el número y tamaño de las antenas de los smartphones.
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Científicos de la Universidad de Aalto en Finlandia, desarrollaron un nuevo concepto de antenas de frecuencias reconfigurables que pudiera ser la solución al uso de diversas antenas en los teléfonos móviles, que hoy día obliga a los fabricantes a tener prácticamente una para cada tipo de comunicación, entre ellas voz, GPS, Wifi.
Los investigadores del departamento de Ingeniería y Radio de la Universidad consideran que, de llevarse a la práctica a nivel industrial, la técnica significaría una pequeña revolución en el mundo de los terminales móviles, que actualmente tienen que emplear diversas antenas en su electrónica para llevar a cabo cada tipo de comunicaciones (voz, GPS, wifi, Bluetooth). Con esta tecnología tan solo necesitarían una mucho más pequeña.
Las ventajas son muchas, pero una de las principales sería el hecho de que los dispositivos funcionarán en las frecuencias de todos los países y todas las operadoras, además de que podrían hacerlo en varias bandas a la vez, saltando de unas a otras, una técnica que inventó hace décadas Hedy Lamarr.
Y es que al dejar a un lado la necesidad de una antena específica para cada tipo de comunicación, el diseño de los propios terminales móviles podría ser más flexible, lo que daría paso realmente a las pantallas que vienen trabajando Samsung y LG entre otros.
Hoy día se utilizan complejos diseños para sacar el máximo de las posibilidades de las antenas y hacer más pequeño su tamaño, con la intención de evitar la interferencia de unas antenas con otras. Con el nuevo concepto, se aprovecharía su cercanía para potenciarlas.
La técnica se ha puesto en práctica hoy día en simulaciones mediante software que permite ver lo que sucede con las ondas de diversas frecuencias en base a parámetros reales de tamaño, ubicación física y otros detalles.
Y es que la nueva antena permite alcanzar un mayor ancho de banda en las transferencias y, además, hacerlo en diferentes rangos de frecuencia a la vez, una diferencia fundamental respecto a las antenas actuales que requieren potenciar una u otra cosa, pero no ambas a la vez.
Con ello, la industria podría incrementar las velocidades de transferencia que se esperan para la próxima generación de móviles, establecida entre cien y mil veces más que en la actualidad, algo que pasó cuando se logró la llegada del 4G actual.
Además, las antenas permitirían que los equipos tengan mayor rendimiento de batería, pues gracias al alcance de éstas, se evitaría el aumento de la potencia para mantener una comunicación entre dispositivos, sobre todo cuando se está manejando. Además, las antenas podrían impactar la instalación de radiobases disminuyendo el número de éstas por espacio para uso de dispositivos.