Mucho potencial todavía
A pesar del gran número de fabricantes que ya utilizan la tecnología, el potencial de la impresión 3D está lejos de ser aprovechado del todo, según el informe, y muchas de las oportunidades están en su uso en partes de la producción, la aplicación de la impresión 3D que está creciendo más rápidamente. El uso de la impresión 3D en partes de la producción creció del cero en 2003 al 43% (18 mil millones de dólares) de la facturación global de productos impresos en 3D y servicios en 2014.
El 32% de los usuarios actuales no cree que sus empresas estén aprovechando todo el potencial de la impresión 3D, mientras que el 45% de los encuestados utilizaría más esta tecnología si sus compañías entendieran mejor sus beneficios, según el informe. La impresión 3D podría acelerar el desarrollo y la entrega de productos personalizados y aumentar la flexibilidad a través de una mejor gestión del inventario y de la producción a tiempo real de mercancías con demanda variable.
Otros puntos que se nombran en el informe: ventajas en la fabricación de pequeños lotes, ventajas en los costes basadas en la eficiencia para algunas aplicaciones y flexibilidad sin precedentes en algunos mercados. La impresión 3D también puede mejorar la calidad a partir de partes más ligeras, mejora ergonomía y más libertad en los diseños.
Sin embargo, la inconsistencia en los procesos de fabricación de los productos utilizando la impresión 3D podría impactar en la durabilidad del producto, como apunta el informe. “Es fundamental considerar las necesidades y las prioridades a la hora de tomar la decisión de elegir entre la impresión 3D y la fabricación tradicional. Como en todo, hay beneficios y compensaciones”, asegura el informe.