La compañía busca hacer énfasis en investigación aplicada, canalizando los recursos para promover descubrimientos innovadores.
Vía Pc World | Por: Mark Hachman
En el 2014, Microsoft retiró tranquilamente a parte de sus investigadores de la plataforma de lanzamiento de “Moonshot”.
Y de acuerdo con un reciente informe de Bloomberg, la empresa había cambiado a más o menos la mitad de sus 1.000 investigadores a un grupo llamado MSR NeXT, con la misión de identificar la tecnología con mayor potencial y entregarla directamente a los clientes, en lugar de trabajar en el aislamiento de los grupos de productos, que era la forma en la que sus investigadores habían funcionado antes.
Esto tiene sentido. Después de todo, cuando Microsoft debutó con su innovadora tecnología de video Hyperlapse el año pasado (técnica que consiste en unir fotografías tomadas durante un mismo lapso de tiempo para crear un video acelerado), a Instagram sólo le tómo una semana lanzar la suya propia.
Si los investigadores de Microsoft hubiesen esperado sólo un poco más, la empresa hubiese perdido la oportunidad de ser la primera en mostrar al mundo tal innovación.
Pero la decisión de Microsoft hoy día representa más que otro pequeño paso lejos del espíritu de creatividad que hizo de Silicon Valley una fábrica de ideas y que cambió al mundo. La intención del padre de Windows, está dirigida a que en un futuro no lejano, el producto que es trabajado de forma laboriosa, tenga la posibilidad de disfrutar de mejoras incrementales y beneficios continuos rápidos. Es la forma más avanzada de alejarse de la investigación pura hacia la investigación aplicada, una tragedia que se está reproduciendo en cámara lenta.
Riesgo frente a la recompensa
En su forma más estereotipada, los investigadores “puros” se imaginan un mundo sacudido por el cambio titánico, impulsado por las tecnologías que rayan en la ciencia ficción, pero gastan millones en experimentos a veces infructuosos. La investigación aplicada, por otro lado, ofrece resultados medibles, incrementales, junto con las ganancias y los ingresos.
Pero el riesgo asociado a la investigación pura, también puede resultar en las bases de tecnologías que sientan las fundaciones para las generaciones de productos. Así organizaciones de investigación puras como Bell Labs, que mató a su laboratorio de Física fundamental en 2008, desarrolló el primer transistor de silicio (la base de cada chip que hay en el mundo), así como hicieron con el láser. Xerox PARC, por ejemplo, ayudó a desarrollar la impresora láser, el Ethernet y el Siri de Apple, entre otros. ¿Dónde estaríamos sin estas innovaciones audaces?
Los inversionistas, sin embargo, consideran que el enfoque de gestión en la línea inferior y la investigación pura han sufrido como resultado. Hoy en día, la mayoría de las empresas se han desplazado a la investigación aplicada y a la entrega de sus “Moonshots” a las universidades y al Gobierno. Intel, que utilizaba para mostrar los proyectos de investigación a la UC Berkeley, cerró su programa nacional “Lablet” en 2001. Y la primera página del sitio web de HP Labs se apresuró a explicar en su momento, “no sólo estamos haciendo la investigación en el laboratorio, también estamos apasionados por convertir nuestros descubrimientos en realidad, para ponerlos en las manos de nuestros clientes y de la sociedad.
Bloomberg citó recientemente al Traductor de Skype, así como los HoloLens y otras tecnologías como ejemplos de productos que se han beneficiado o se beneficiarán del cambio. Y si usted es un lector de negocios preocupado por los altibajos de las acciones de Microsoft, es probable que preste atención.
Vivimos en un mundo donde los inversionistas tiran el dinero en consolas de videojuegos para los perros, en servicios que llevarán el Gas hasta su auto y… anuncios, anuncios, anuncios. Sólo unas pocas empresas parecen preocuparse por la investigación pura. Una de ellas es Alphabet (Google), que dividió sus negocios, desde un provechoso concepto de publicidad con Google a una serie de pequeñas startups que podrían ser la próxima gran cosa en el negocio tecnológico.
Así que si usted está preocupado sobre dónde estará su próximo teléfono o Gadget y cuándo lo tendrá en sus manos, la reorganización de Microsoft es algo bueno. Sí, la empresa sigue haciendo investigación pura, poco menos que antes, y esa podría ser la razón para ver una vaga sensación de pérdida a la que se aferra ese informe. Pareciera que estamos perdiendo en silencio un poco más de lo que hizo grande a Sillicon Valley.