Muchos de los CIOs aseguran que los jóvenes que están saliendo de las universidades no están preparados para trabajos en la corporaciones TIC. Sin embargo, las universidades están tomando cartas en el asunto.
Computerworld | Thomas Hoffman
La mitad de las compañías no está preparada para adaptarse a las distintas demandas y formas de trabajo que requieren sus empleados según su edad.
El 88% de los trabajadores de todas las generaciones considera que es bueno contar con una plantilla de diferentes edades y que supone un activo para las empresas. Sin embargo, la encuesta existe un importante reto que los directivos deberán superar. Más de un tercio (el 35%) de los empleados de más edad anticipa que las tensiones en el lugar de trabajo aumentarán con la llegada de la Generación Z a sus empresas, según un estudio encargado por Ricoh. Con la siguiente ola de cambios provocados por la tecnología, que sin duda va a irrumpir y alterar más aún el entorno de trabajo, es fundamental establecer entornos que realmente faciliten y motiven el trabajo armonioso y productivo de todas las generaciones. El 52% de los empleados encuestados declara que las empresas no consiguen cubrir las necesidades de las distintas generaciones que coexisten en un mismo lugar de trabajo.
Por su parte, Computerworld ralizó de forma independiente una encuesta a 244 profesionales del sector TI, y se encontró que las tres cuartas partes considera que las academias no están formando a los jóvenes graduados paras los trabajos en las TIC de hoy, o del futuro próximo. La encuesta, que incluyó algunas entrevistas con algunos CIOs, indicó que las faltas están en el desarrollo de las habilidaes para los negocios, resoluciónde problemas, comunicación interpersonal, gerencia de proyectos e integración de sistemas.
La era post-millenials
Los miembros de la llamada Generación Z son únicos. Por un lado, han tenido una fuerte influencia de sus individualistas padres de la Generación X, también han oído las historias de sus abuelos, quienes fueron a su vez hijos del baby boom, y han sido testigos de los éxitos y fracasos de los hijos del milenio. La combinación de todo esto junto a su interés digital, significa que cuentan con una sólida base para desarrollarse y educar a los demás en un mundo empresarial en constante evolución y cada vez más exigente.
“Los miembros de la generación Z que accedan en el futuro a puestos directivos –dijo David Mills, director ejecutivo de RICOH Europe– estarán perfectamente situados para liderar una forma de trabajar sin fronteras y garantizar que sus empresas compitan en un mercado regional único. Las grandes organizaciones también se beneficiarán. El constante apetito de esta generación por la innovación en la forma de trabajar (donde la constante corriente de innovadores y nuevos productos, procesos y tecnologías, es la norma) será un factor clave para los actores de los mercados verticales que busquen la globalización”.
Además, la encuesta reveló que el 65% de los encuestados reconoce que hay diferencias fundamentales en la forma de trabajar de los empleados de cada generación. El contraste más evidente surgió en sus respectivas actitudes, expectativas y estilos de trabajo. La comunicación cara a cara, aun siendo el método preferido de todos los grupos de edad, sufre un descenso generacional. La preferencia por ella cae desde el 77% entre los hijos del baby boom al 58% en la generación Z. Por otro lado, el 73% de los miembros de la generación Z cree que su futuro empleador responderá a sus necesidades, en oposición al 48% de las otras tres generaciones.
“Intentar constreñir a los empleados (especialmente a los de la generación Z) con las mismas formas tradicionales de trabajar, y obligarles a utilizar las mismas herramientas, sencillamente no funcionará. Las personas son a menudo el mayor diferenciador para una organización, y las empresas de más éxito serán aquellas que puedan capacitar y comprometer a todas las generaciones de su plantilla, desde los más experimentados hasta los jóvenes más prometedores”, finaliza Mills.