Los robots aspiran los pisos. Ellos recogen y empacan las cajas en las bodegas, ganan en Jeopardy y pronto pueden tomar el trabajo de TI y los procesos de negocios que tienen los proveedores de “Offshore Outsourcing” (tercerización en otros países).
Para el ejemplo, tomemos la empresa Blue Prism, basada en el Reino Unido, que hace herramientas para el desarrollo de software y metodologías diseñadas para permitir que los usuarios de los negocios, creen robots que automaticen los procesos de negocios dirigidos bajo reglas.
Blue Prism lo denomina “automatización robótica”. James R Slaby, director de investigación de HfS la llama “la nueva opción laboral en herramientas de servicios para negocios globales”.
“Es la automatización de varios procesos de negocios: tomando el trabajo tradicionalmente hecho por humanos e implementándolo en un software y el software resultante corre ampliamente sin atención para ejecutar esas funciones, contrario a requerir implementación humana y datos de ingreso”, comenta Slaby.
Los robots de software “replican el trabajo de los seres humanos reales – entrenados de la misma manera y sujetos a los controles de los mismos sistemas como usuarios para proteger la integridad transaccional y la seguridad física de los datos de los clientes”, dice Pat Geary, director de marketing de Prism Blue.
Contrario a las herramientas de ‘script’ o los ‘macros’ para realizar funciones básicas, Geary dice que la oferta de Blue Prism está enfocada en automatización escalable de procesos empresariales para los “backoffices” más grandes del mundo.
Pero con menores costos que el desarrollo realizado por humanos. “Tradicionalmente un proyecto puede ser analizado y luego se diseña una solución, se construye, se prueba y se despliega por desarrolladores y por recursos de especialistas dedicados de TI. La gobernabilidad requerida para estos proyectos hace poco económico servir a ‘la gran cola’ de requerimientos de automatización”, dice Geary. “Entonces en la realidad, la única opción disponibles para los negocios es tercerizar o enviar fuera del país la carga de trabajo para reducir los costos”.
Blue Prism dice que sus equivalentes robóticos (FTEs) cuestan un tercio en comparación con el “offsohroe” y una vez que los clientes aprenden el sistema, el cual toma dos o cuatro meses, ellos pueden escalar de forma instantánea a FTEs Virtuales. En la actualidad Blue PRism tiene mil robots que corren para clientes como Telefónica, Fidelity Investments y Experian.
–Stephanie Overby, CIO (US)