Si está cansado de sintonizar la misma vieja música, trate de variar un poco con Jango.com.
Parecido a sitios como Pandora y Last.fm, Jango ofrece estaciones de radio por Internet en transferencia continua que adapta a su gusto basándose en sus artistas favoritos. Pero va más allá de funcionar como un DJ; la versión beta que probé integra un aspecto social que hace más entretenido descubrir la nueva música, ya que le pone en contacto con oyentes que tienen preferencias similares a las suyas.
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Jango (Beta) | Jango
Jango lleva el descubrimiento de
la música al próximo nivel. Gratis
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Cuando usted escribe el nombre de un artista, el sitio crea una estación de radio centrada en ese artista (a diferencia de Pandora, no le permite ingresar el título de una canción). Jango también agrega otras canciones que cree que usted disfrutará basado en un número de criterios. Por ejemplo, el servicio toma en cuenta lo que otros usuarios que prefieren al mismo artista están escuchando y busca actuaciones del mismo estilo con géneros y períodos de tiempo similares. Aunque el servicio me presentó algunas mezclas agradables, intentó desviar mi estación de Queen hacia Iron Maiden y Ozzy Osbourne, que son demasiado “heavy metal” para mi gusto.
Jango guarda un número ilimitado de estaciones en su perfil y ofrece varias maneras de personalizarlas. Usted puede agregar artistas (Jango ofrece sugerencias, o usted puede poner las suyas); prohibir ciertos músicos; y decidir si quiere reproducir canciones populares, música menos conocida, o algo entre ambos extremos.
Selección limitada
Personalizar las estaciones claramente me ayudó a obtener selecciones de canciones más afines a mis preferencias, aunque con sólo 15.000 artistas y 200.000 canciones en la rotación, el servicio tiene sus límites. Por ejemplo, en el momento de la evaluación, sólo había diez canciones de Queen en el sistema (según Jango, el servicio tiene acceso a mucha más música de la que enumera, pero toma tiempo analizarla y agregarla a la base de datos de los oyentes; Jango también dice que constantemente agrega canciones a la rotación). Jango sigue las restricciones definidas por la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital –y paga derechos de autor a las disqueras y los artistas– así que el sitio es perfectamente legal. Jango gana dinero cuando usted pulsa en los vínculos para comprar música a través de sus socios (como la iTunes Store y Amazon.com), además de los anuncios publicitarios que pone.
La verdadera diferencia en Jango está en sus características de red social, que le ayuda a relacionarse con personas que tienen el mismo buen (o mal) gusto cuando usted crea un perfil en Jango. El reproductor de Jango muestra canciones alternas creadas por el artista actual, además de los usuarios que escuchan a los mismos artistas u otros similares. Pulsar sobre una canción le llevará a la estación que la está tocando; seleccionar un usuario le llevará a la página de su perfil, donde podrá ver las estaciones de esa persona y otra información (la fecha de nacimiento, su lugar de residencia y sus películas y libros favoritos, por ejemplo) que haya decidido compartir. El sitio también le permite ver la música que están oyendo sus Amigos de Jango e intenta ponerle en contacto con Like-Minds, que son usuarios con inclinaciones musicales similares a la suya. Un toque de cortesía es que Jango se ofrece a enviar una nota de agradecimiento cuando usted deja de sintonizar la estación de otro.
Por lo general, la recepción de música fue homogénea, con pocas interrupciones y en una rara ocasión Jango indicó que una canción se estaba reproduciendo aunque no se oía nada. Jango dice que está trabajando para reparar un número de problemas.
Así y todo, Jango es sólido. Si le gusta esto de las redes sociales –y quiere ver cómo puede ampliar su universo musical– entonces Jango vale la pena.
-Cathy Lu